27/8/08

ELUL



Elul comenzará en unos días. Elul me recuerda los días de primavera, cuando el sol empieza a calentar un poco más y la mente se refresca con nuevo aliento de vida que surge del oscuro invierno del corazón. A veces hace falta sacudir las hojas secas del árbol para que broten las nuevas. A veces hace falta nutrir las raíces con tierra diferente, aquella tierra que necesito para seguir viviendo. Hace falta elevarse hacia el sol, para obtener más luz. Podar para que vuelva a crecer. Elul es un mes que inicia un fin y funda otro año, es la energía que vuelve en un esplendor suave de un nuevo aroma. Un aroma desconocido en la nariz, un aroma que se va haciendo familiar, se asienta en mi sangre y me habita. Elul regresa con el perfume de lo que amo, su olor característico me anuncia un exquisito placer, una fuente de inagotable vida que me invita siempre a beber. Elul empieza a alumbrar el fin de largos días invernales, con su calor que nutre los huesos y el alma. Elul inmersiona en mi yo, me bucea y abre espacios de aire nuevo, como una lombriz surca canales y nutre de aire la tierra y la hace más fértil. Elul me abre sus alas extensas y fuertes para sondear el inmenso cielo de mi vida. Volamos con prisa, volamos porque ya no hay tiempo para demoras, no hay tiempo en el reloj de los días. Volamos sobre el tiempo y me libero.

Elul: mes del calendario hebreo previo a Rosh Hashana, el año nuevo judío. Mes de balance espiritual y material.