23/7/12

LOS SIMULACROS

Las personas muestran sus estados larvales
respiran según el otro
fingen la existencia.
Exhiben sus alas de tornasol virtual
vuelan hacia la supuesta misión
y su estela es de vacío.

Cuando no se ve verdad
lo justo parece desafortunado
lo que vale es la cáscara del ser.
La ausencia del fruto esencial
bajo las miradas de los sombreros
el aparente bien bajo el talit*
y la barba -que no habla de la benevolencia de Hashem**-.
Las palabras de los que dictaminan
suenan huecas
se quiebran en un espejo
que sólo devuelve un reflejo de lo que no es.
-Rebe, si estuvieras acá-

La amalgama de discursos
no entran en la sangre
resbala sobre la piel ávida
el sudor crece y se expande
pero no se ve.
Lo pnimi*** es sólo un concepto.
Ayuno de amor al prójimo.

Hay un hombre justo que sufre
y calla.
Hay un hombre justo que los mira
y calla.
-¡Rebe, si estuvieras acá!

El latido se ahoga
de tanta individualidad
nadie se atreve a decir la palabra
que entra y enlaza el corazón.
Andan con recato aparente
el silencio típico del cobarde
que teme perder su pedestal
desde donde adora y es adorado.

La verdad se enferma bajos los atuendos
y las mangas largas de unas cuantas existencias.

*talit: manto de rezo
**Hashem: el nombre, refiriéndose a Di´s
***pnimi: lo interno